Esbozos para una
pedagogía urbana.
Este texto muestra
algunos de los problemas actuales en la vinculación entre la educación y la
ciudad, desde el enfoque de la pedagogía urbana.
Nájera cuenta que las
ciudades están marcadas por tener un capital, haciendo así que se produzca una
catástrofe ecológica, pero la dramatización de este fenómeno se suma al
desconocimiento de las dimensiones no lineales de la ecología urbana, haciendo que
se reconfigure el pensamiento urbano creando una nueva ciencia interdisciplinaria.
Sassen (1997), comento que la
economía mundial ha ido transformando las relaciones sociales en el espacio
urbano, haciendo que la ciudad cree sus propias zonas donde se mueva todo el
flujo financiero y tecnológico, otras zonas donde aparecen nuevas
marginalidades que los tratan como agentes de poder.
Cabe señalar que
se alude en muchas ocasiones a una sociedad de la información, que modifica el
espacio urbano en torno a una nueva economía basada en la emergencia acelerada
de las nuevas Tic’s. Se trata de desmantelar a los territorios tradicionales a
partir de la producción de nuevas tecnologías. Esta sociedad post-alfabética,
se caracteriza por un trabajo cognitario intensivo, fragmentado y calularizado.
También nos
señala que la influencia de los agentes inmobiliarios en la liberación de los
mercados, potencia la segregación social, creando así nuevas marginalidades de
ciudades de pobres. La orientación mercantilista de los territorios, produce
varias ciudades, las miserables, las emergentes y los integrados.
En el contenido de la acción educativa, se ven
posturas de dimisión de la posición del educador, siendo su único núcleo
fundamental el de la idea de transmisión y mediación cultural. En la pedagogía social,
se origina las preocupaciones por estudiar fenómenos de la educación no formal,
al calor de la crisis de la educación, posteriormente en la emergencia de la
utopía de la ciudad educativa o ciudad educadora también los efectos y
complejidades asociadas a los procesos de reformas educacionales.
Hay 3 dimensiones de
análisis posible para enriquecer la relación, educación y ciudad: La ciudad
como contexto de educación, una política educacional territorial. La
ciudad como medio o vehículo de educación, una escuela de la vida. La ciudad
como contenido educativo, currículo. El reto
socioeducativo que se nos presentan, en la disponibilidad que tengamos como
sociedad de abrir la ciudad a las nuevas generaciones, es plantearnos el abrir
las puertas a esos recién llegados. Y otro de los desafíos que hay es la
incidencia en educación, como movilización de la ciudadanía en torno a la
transformación cultural, hay que incidir en las políticas educativas.
En conclusión, en las actuales ciudades se está
creando una gran separación entre la sociedad, debido a las nuevas tecnologías,
creando así una gran separación entre las personas que utilizan y tienen acceso
a las nuevas tecnologías con las personas que ni saben utilizarlas ni tampoco
tienen acceso con ellas. Desde la educación se pueden aportar y facilitar que
la población que esté marginada, se interese por el tema y llegue a integrarse.
No hay comentarios:
Publicar un comentario